Alba y Diego son hermanos. Jaime es un amigo. No sólo los primeros años de la infancia son interesantes de retratar. Los niños algo más mayores tienen un encanto especial. Los rasgos más fuertes de su personalidad van identificándolos como los adultos que serán en unos años. Aqui ya no vale ponte aqui, haz esto o lo otro. Ellos participan activamente en la sesión y es algo muy divertido, ya que siempre aportan ideas mucho más frescas que las mías. Ellos encantados y yo más.
Me gustan los niños, me encantan, me aportan energía, me hacen reír con sus ocurrencias y ver la vida de forma mucho más bonita. Me dan paciencia y me han hecho ver que las cosas verdaderamente importantes no son las que precisamente nos ocupan la mente a los adultos, así que estoy encantada de haberme especializado en fotografía infantil.