Hago muchas sesiones en exterior ya que en Burgos tenemos espacios verdes para rato, pero hay clientes que buscan la comodidad del estudio. Los bebés que aún no se sujetan bien, están mucho más cómodos en el estudio y resulta mucho más fácil hacer las fotos con los distintos decorados y atrezzos. Éstos dos hermanos se lo pasaron bomba. Y entre risas y travesuras hicimos un reportaje de lo más completo.
Me gustan los niños, me encantan, me aportan energía, me hacen reír con sus ocurrencias y ver la vida de forma mucho más bonita. Me dan paciencia y me han hecho ver que las cosas verdaderamente importantes no son las que precisamente nos ocupan la mente a los adultos, así que estoy encantada de haberme especializado en fotografía infantil.