Y no, por supuesto no es que sale en los periódicos… Es un Nicolás mucho más adorable y bueno. Las sesiones de recién nacido se hacen con muy poquitos días, pero a Nicolás le trajeron al estudio con 19 días y no cerró los ojos más que un ratillo. Aún así, se dejó colocar en cantidad de poses. Eso sí, mejor que siga siendo tan bueno porque su hermana no tiene la intención de dejarle tranquilo. Y es que una niña de 3 años puede querer muy fuerte…jejeje
Me gustan los niños, me encantan, me aportan energía, me hacen reír con sus ocurrencias y ver la vida de forma mucho más bonita. Me dan paciencia y me han hecho ver que las cosas verdaderamente importantes no son las que precisamente nos ocupan la mente a los adultos, así que estoy encantada de haberme especializado en fotografía infantil.