Julia, a punto de cumplir 1 añito, me lo puso fácil, al menos al principio. se reía con cualquier cosa y parecía gustarle todo lo que hacíamos… hasta que se cansó. Los bebés son así, están bien un rato, pero una hora puede parecerles larguísima y es mejor trabajar rápido. Aún así, nos deleitó con mil gestos.
Me gustan los niños, me encantan, me aportan energía, me hacen reír con sus ocurrencias y ver la vida de forma mucho más bonita. Me dan paciencia y me han hecho ver que las cosas verdaderamente importantes no son las que precisamente nos ocupan la mente a los adultos, así que estoy encantada de haberme especializado en fotografía infantil.