Qué dos preciosidad de hermanas. Y eso que la peque estaba un poco pachucha… Aún así, pasamos un buen rato en el estudio. Y Lucía se lo pasó bomba con las fotos. Al final, si ellos se lo pasan bien, el resultado es bueno.
No suelo hacer fotomontajes, pero hay veces que una se deja llevar por la fantasía y …¿Por qué no hacer algo distinto? Os dejo con éstas dos bellezas.