La afortunada ganadora del sorteo de Facebook es ella, Marian, un verdadero encanto de persona.
Es veterinaria y ahora echa mucho de menos a sus pacientes y a la mínima oportunidad examina a cualquier perro con el ojo hinchado que se encuentre por los caminos cerca de su casa. Ama su trabajo, como todo el mundo debería hacerlo.
Su perra Luna fue testigo y modelo por un rato. Y qué decir de la protagonista, dispuesta a meterse entre girasoles y matorrales. Pasamos una tarde genial disfrutando de los últimos días de verano.
Os dejo con algunas de las imágenes de aquella tarde calurosa. Por cierto Marian, gracias por las orquídeas, de momento siguen vivas…
Me gustan los niños, me encantan, me aportan energía, me hacen reír con sus ocurrencias y ver la vida de forma mucho más bonita. Me dan paciencia y me han hecho ver que las cosas verdaderamente importantes no son las que precisamente nos ocupan la mente a los adultos, así que estoy encantada de haberme especializado en fotografía infantil.