Me encantan las sesiones perrunas. En estudio, los perros salen bien, pero es que en exteriores ya… En su ambiente, con el agua, las hojas, en plena naturaleza, podemos descubrir su “perronalidad”. Eso sí, tiene que atender órdenes básicas porque si no será una locura de sesión. Y no hay que olvidar una buena ración de chuches para sobornar..
Me gustan los niños, me encantan, me aportan energía, me hacen reír con sus ocurrencias y ver la vida de forma mucho más bonita. Me dan paciencia y me han hecho ver que las cosas verdaderamente importantes no son las que precisamente nos ocupan la mente a los adultos, así que estoy encantada de haberme especializado en fotografía infantil.